Su incompetencia, torpeza y estupidez, el hecho de que normalmente tiene razón y su extraordinaria habilidad para escapar de situaciones peligrosas son suficientes para acabar transformando a su directo superior el anterior Inspector Jefe Dreyfus en un psicópata homicida, hasta el punto de que llega a crear una poderosa máquina y amenaza con destruir el mundo en un desesperado intento de acabar con Clouseau.
Sonríe bonita dice rosa 21.
Clouseau tampoco es muy inteligente, y suele seguir una teoría completamente estúpida del crimen, resolviendo el caso solo por casualidad.